La miel es un alimento natural utilizado desde lo más remoto en las culturas mediterráneas. Los griegos y los romanos precursores de nuestra cultura la ofrendaban a los Dioses y la consideraban un manjar divino.
En la composición de la miel abundan los azúcares como Glucosa (31%) y Fructosa (38%) así como Sacarosa y Maltosa, Polisacáridos, enzimas, sales minerales y ácidos orgánicos. Además la miel contiene un bactericida natural que produce la abeja para su conservación que actúa como un antibiótico natural en el organismo.
La inmensa mayoría de las mieles son multiflorales, sin embargo, la destreza del apicultor puede dirigir la producción hacia mieles monoflorales, presentando estas últimas unas características constantes en cuanto a gusto, aroma y color.
Todas las mieles en su estado natural, tarde o temprano acaban cristalizando. La cristalización de la miel, es una prueba de su naturalidad y por lo tanto de que mantiene todas sus cualidades originales.
El consumo de la miel produce efectos muy beneficiosos en el organismo humano y es recomendable en enfermedades de tipo vascular, anemia, neurastenia, reumatismo, gota, enfermedades de vías urinarias, riñón, afecciones bronquiales y pulmonares, gripe, acideces, pirosis de las úlceras de estómago y duodeno, etc. Además contiene sustancias indispensables para todo ser vivo, cuya presencia en la dieta diaria, hace que la miel sea un producto excepcional.
En la provincia de Cuenca destacan la miel de La Serranía y la miel de La Alcarria, siendo esta última la única con Denominación de Origen.
Número de Colmenas: 31.000
Producción: 30.440 Kgs.
Valor producción:
Plantas envasadoras: 13
Las empresas de este sector se encuentran agrupadas en la Asociación de Envasadores de Miel de Cuenca.
C/ Colón, 73 , 1º
16002 CUENCA
Apartado de Correos 129 (Cuenca).
Teléfono: 969 23 64 37